La universidad de todos los nayaritas, tiene varios renglones en déficit, uno de ellos es, la recuperación de los edificios que son sede de sus unidades académicas; más de treinta años tienen como promedio muchos de ellos; el caso de la escuela preparatoria número 13 era la mejor muestra de su natural deterioro y los riesgos de mantenerlo en uso.
Con el nuevo esquema legal del patronato administrador del impuesto especial para la UAN, apareciendo grandes deudas y también cumplimiento de autoridades responsables, existen recursos que van aplicándose a cuenta gotas en las prioridades de infraestructura de la universidad.
La escuela preparatoria número 13, vino a desfogar en mucho, toda la demanda de los estudiantes de la ciudad capital que pretenden educarse en el campus, en la preparatoria número 1, que es la emblemática del sistema educativo que prevalece en la UAN, de aquella zona, son decenas las colonias de la ciudad, cuyos jóvenes egresados que buscan una carrera universitaria, son quienes ahí estudian, y la planta de catedráticos, han mantenido niveles aceptables de aprovechamiento.
Este lunes 15 de agosto, se hará entrega al rector Jorge Ignacio Peña, del nuevo edificio; será una nueva etapa de la Prepa 13, más espacios para esta inacabada y de hecho incrementada demanda de miles de estudiantes que buscan un modelo de vida en base a un título universitario.
La UAN es el centro de estudios que responde a esta demanda; sin embargo, los jóvenes aspirantes, sus padres y la sociedad deben saber que la educación preparatoria demanda una serie de aptitudes que no todos los peticionarios tienen; esta es una etapa formativa del carácter, de la personalidad de los futuros universitarios; aquí es donde les nace el hábito por la lectura, la constancia ante los retos intelectuales, y la responsabilidad de cumplir con los programas académicos.
Por esto, por estas determinaciones del modelo académico que se tiene en la UAN, que bueno es, que se tenga el nuevo edificio de la escuela preparatoria número 13; ahí se educarán las nuevas generaciones en espacios dignos y sin peligro de accidentes.
Quienes ahí lleguen de nuevo ingreso deben ser sabedores de que esta universidad cuyo sostenimiento es del Estado y de la sociedad, los recibe generosamente; empero, su aplicación en el estudio y los resultados académicos que alcancen serán la única argumentación para proseguir en su aspiración de tener un título universitario.
Logros de la sociedad a través del patronato administrador, que por cierto nada mal estaría que hiciera un público informe de sus interiores financieros y administrativos; y logro del rector Jorge Ignacio Peña, que ha sabido hacer sinergia con el gobierno y las instituciones que le son afines para apuntalar la trascendencia de sus proyectos de reordenar la Universidad de todos.
El movimiento pues, se demuestra caminando.
Contacto.- cronicaslip@gmail.com
