Al rector Jorge Ignacio Peña, le ha correspondido el difícil papel de poder ser, el hombre, el académico, el político que remodele el espeluznante estado en que se encuentra la Universidad Autónoma de Nayarit; empero, para romper de cuajo el esquema corporativo que tiene sumida a la institución en el peor escenario posible, la corrupción y el aprovechamiento descomunal de sus recursos por parte de los enclaves del poder sindical, se requiere de talento, valor y algo de eficientes mecanismos de operación.
Me explico, la UAN hoy es el catastrófico resultado del cómo la ignorancia, lo rupestre del peor sindicalismo se apoderó de territorios que no les pertenecían por su propia naturaleza; el enclave delincuencial que ahí va uncido, hoy es la explicación del penoso asunto penal que tienen, luego de las acciones fiscalizadoras del OFS y de la secretaría de la función pública, que ya dieron vida a la actuación de la ley para hacer punitivo el procedimiento fiscalizador.
El arcaico liderazgo de Luis Manuel Hernández, subsiste por el oprobio de que tiene decenas de millones de pesos asignado en el presupuesto de egresos que anualmente aprueba el consejo general universitario, (aparte del porcentaje que les descuentan a los trabajadores que va limpio a las arcas sindicales) no podemos esperar menos de esos mozalbetes que son menores de edad (el 38% de sus miembros) que por unas migajas son obsecuentes.
El Spauan, en una tercera parte de lo que indebidamente recibe el Setuan, también tiene el oprobio de que son parte de las causas primigenias del problema financiero que tiene sumida en un pozo irresoluble a la universidad de todos los nayaritas; y que como dicen mis amigos –los viejos catedráticos- ya se “feuanizó”; y la federación estudiantil, es cómplice del mismo esquema, recibe indebidamente la tercera parte de los millones que le entregan al sindicato de docentes.
Con el lavado de dinero que hizo el anterior rector, tan contento estuvo con su operador que lo hizo su compadre; y con el pleito de comadres del cacique, con enojos al estilo siciliano; hoy en el campus prevalece la indebida afirmación del sindicato de trabajadores que mantienen el paro loco, que impide realizar las labores sustantivas de los docentes; que inclusive, es tal su estolidez que en el acto de la explanada, mandaron sus golpeadores a intimidar a maestros que señalaron enfáticos que Luis Manuel no es su representante.
LA RUTA A SEGUIR
El librito de solución de crisis, nos indica que, en caso como el que tiene la UAN, para romper el enclave de poder caciquil de Luis Manuel y de los docentes, y de pasadita a los feuanos, se requiere de un elemento externo que sirva de detonante para variar la correlación de fuerzas existente, y, desde luego que el rector sea el factor principal de negociación, para que concrete el más delicado de sus proyectos, liquidar los 574 docentes feuanos y los 500 y tantos inútiles de doble plaza, tanto docentes como administrativos.
Para eso, si el gobernador envía al congreso el proyecto de nueva ley orgánica de la UAN, en plazo breve, para romper de cuajo el esquema corporativo que tiene en un puño el control interno, se modifican los órganos de gobierno, se liquida el oprobio del actual consejo general universitario, y se establece que nunca más, trabajadores, ni estudiantes serán factor de poder para la toma de decisiones de la universidad, que las funciones sustantivas les corresponden a los catedráticos.
Solo entonces la UAN podrá surgir de sus miasmas, se podrá pagar a un catedrático que tiene licenciatura y maestría lo que le corresponde conforme a la media nacional y no será más pasto de las burlas de los administrativos que son cientos y que tienen doble plaza que hoy, por ser las etarias de su sempiterno líder ganan el doble que los docentes, sin cumplir adecuadamente su función.
Nacho Peña, podría pedir cien millones a la SEP y a SHCP para liquidar a los mil y tantos estorbos que tienen a la UAN sumida en la peor crisis de su historia, con el apoyo del gobernador, que estaría operando de manera concertada lo propio en el congreso con una nueva ley orgánica de la universidad.
¿Es mucho pedir..? éste es el escenario que han visualizado viejos catedráticos, universitarios con amor a la camiseta, egresados de la UNAM y de la U de G, que se aferran a que la inteligencia no puede seguir siendo pisoteada por la vulgaridad y la zafiedad de los enclaves caciquiles de los actuales sindicatos.
Mientras tanto con este paro loco, se llega al inaudito que en una UA como Agricultura, no se puede darle seguimiento a las mediciones de los experimentos que ahí tienen; y el colmo..! un invernadero con valor de casi un millón de dólares, obtenido por docentes e investigadores en España, ya llegó a Veracrúz, y aún no se tiene preparado el terreno para su instalación en los terrenos de la facultad; todo porque la sacrosanta voluntad de Luis Manuel, tiene el síndrome de Pompeya, darle en la madre a todo lo que significa el poder de la cultura y del conocimiento.
Luego del sentido discurso del rector, lo que vimos ayer, es que la base de docentes ya está superando a su líder; lógico que Nacho Peña, debe aprovechar la coyuntura para llevar a buen fin todo este esquema de decisiones.
Si lo dejan…
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