La ceremonia mensual que lleva a cabo el Tribunal Superior de Justicia de Nayarit, hoy se prorrogó para el viernes 5 de febrero; la efeméride es trascendente, no solo se conmemora el XCIX nonagésimo nono aniversario de la promulgación de la carta de Querétaro, puesto que para los nayaritas significa un aniversario mas de la erección de nuestra entidad federativa, tal cual lo estableció el numeral 47 constitucional; y siendo un día hábil, el poder judicial cumplió con la liturgia cívica y le correspondió ser el orador en esta ocasión al magistrado de la sala constitucional Miguel Ahumada Valenzuela.
El magistrado -aunque se conduce con bajo perfil- focaliza los reflectores de los medios; es, a su vez, el secretario técnico de la comisión inter institucional para la implementación del nuevo sistema penal en la entidad; proviene de la lucrativa actividad del ejercicio de su profesión, asesor jurídico del gobernador Roberto Sandoval, y los primero años de su mandato, responsable de todo lo jurídico que sucedió en el despacho del gobernanate.
En la sala constitucional, estuvo a un tris de ser el nuevo magistrado presidente, sin embargo, la habilidad de Pedro Antonio Enríquez y su fortalecida alianza con uno de los hombres fuertes de Roberto, le posibilitó el segundo periodo como presidente del TSJ y del CEJ aunque para ello, se haya modificado el texto de la constitución local.
Los hombres que tienen estatura mas alta que el promedio normal del mexicano, tienen varios factores en contra a la hora de hacer exposiciones públicas; Miguel Ahumada tiene una excelente presencia, que tendía a agacharse un tanto cuando estaba en la tribuna; ahora con la experiencia de este tiempo en el tribunal, y el haber pasado todos los avatares de trámites y angustias para la obtención de recursos de la Setec para el cumplimiento de los tiempos en la implementación del NSJP; le ha dado una cancha suficiente para empezar a ser un hombre público que llama la atención por sus expresiones jurídico politicas y el talante que le imprime a su personalidad en sus interlocuciones.
La disertación de Miguel Ahumada causó cierta espectativa entre sus pares, inició con una admonición en el sentido de que «ninguna sociedad puede vivir sin un ideal que le sostenta..» y de este aserto ponderó los ideales que están consagrados en la Constitución política de los mexicanos; previamente hizo un breve análisis de lo que en su momento significaron las cartas de 1824; la de 1857 y la vigente de 1917, el hito histórico de los mexicanos, la consumación de la independencia, las leyes de reforma y el nacimiento del nacionalismo mexicano y los anhelos del pueblo, de justicia social y los derechos sociales.
Mas adelante, hizo una relación de los derechos fundamentales que están consagrados en la carta magna; y señaló que el Estado debe ser el auténtico garante de su vigencia y respeto irrestricto en la esfera individual, referida a la obligación de jueces y magistrados de cumplir y hacer cumplir con el mandato constitucional de justicia «pronta y expedita» aún, «con la fuerza legítima del Estado», y además señaló con énfasis que «porque no podemos ni debemos desvincular el orden jurídico, el concepto de la jusiticia».
En el texto del documento del magistrado Ahumada, se plasmó con un tanto de urbanidad política que «por las omisiones del pasado reciente..» esta administración tuvo que trabajar a marchas forzadas y con estrecheces financieras para la implementación del NSJP, y resaltó la excelente disposición de los tres poderes, que actuado en sinergia para que hoy en la entidad, la vigencia del nuevo sistema de justicia penal de corte acusatorio y adversarial sea un actuante realidad; Miguel, hizo un respetuoso llamado para que en la procuración y administración de justicia, funcione el nuevo modelo y los convenios se cumplan.
Un singular apartado de su discurso, se refirió a la enorme transformación de los derechos humanos que fueron adicionados a la carta magna, y que a partir de su publicación, comenzó una «tarea inmensa de difusión, análisis y desarrollo de contenido» tarea «que les corresponde a jueces legisladores, ejecutivos, comisiones de derechos humanos y la sociedad civil en su conjunto..»
Habló de «inercias perversas e intereses creados de aquellos que se niegan a irse a las vitrinas del pasado..» dado que México «merece estar en el concierto de las naciones como un Estado de plena vigencia del derecho..» hizo el llamado a los juzgadores «debemos tener tribunales competentes que protejan al ciudadano contra los actos que le violenten sus derechos fundamentales, con las debidas garantías y dentro de los plazos razonables..»
Hizo el credo del cómo debemos los mexicanos honrar a la Constitución, y señaló el deber ser del poder judicial «desterrar la vieja práctica de una justicia lenta e ineficiente; ya que afecta negativamente a las condiciones de crecimiento y bienestar de los mexicanos; es imperioso que nuestro sistema de justicia sea capaz de procesar adecuadamente los conflictos que se generan en la vida social..»
Al final de su exposición, el magistrado Ahumada, dijo que estos retos «imponen una transformación de nuestras instituciones, de los hombres y mujeres que en ella servimos, para sentar de una vez y para siempre, las reglas básicas de una convivencia democrática en una sociedad plural y compleja.
Un buen documento, de un funcionario judicial que tiene en sus dedos el manejo de la actual conflictiva jurídico política, y desde sus dinteles constitucionales, señaló rumbos y convocó a «actuar unidos y con objetivos comunes..»
Contacto.- cronicaslip@gmail.com
