Adiós a la sequía de 70 años sin título. Con una definición cardíaca desde el punto de penalti, el Atlas se convirtió en campeón del torneo Apertura 2021 de la Liga MX después de imponerse 4-3 al León en el Estadio Jalisco. Al final de los 120 minutos los Rojinegros se impusieron 1-0, empatando el global 3-3 y obligando a los lanzamientos.

Tuvieron que pasar cuatro generaciones, setenta años de espera para que una afición tan sufrida, pero resiliente y aguantadora, pudiera sonreír y saliera a gritar «Campeón», en algo que pocos pudieron lograr por segunda vez en la vida.

No pudo llegar hasta esta orilla de un eterno viaje don Ramón Cano Figueroa, icónico aficionado que popularizó el grito «mil veces arriba el Atlas», y tampoco lo lograron ninguno de los que obtuvieron ese único título. Uno a uno, fueron muriendo todos ante la ilusión de conocer a aquellos héroes que lograrían emular su hazaña.

Tampoco vivió el tico Edwin Cubero, autor del gol en 1951, para ver a Julio Furch marcar el penal definitivo. No, tampoco estuvo en el Estadio Jalisco Eduardo Valdatti. El ‘Che’ le entregó a Diego Cocca desde el cielo la estafeta como el histórico técnico que volvió a encumbrar al Atlas en todo lo alto.

Atlas, Campeón. Tras una agónica tanda de penales, donde Camilo Vargas le abrió el camino a Julio César Furch para anotar el penal definitivo.

Se acabó una larga historia. Se terminaron las burlas sobre una eternidad incumplida. O en otras palabras, «los mariachis callaron».

Esos mariachis que suenan desde el lado más mexicano de todos, solo observaron a la distancia el festejo y el grito «cómo no te voy a querer», de una afición que gritó, cantó y celebró de una forma que no sabía cómo expresar. Una alegría desconocida y por ende, inacabable.

 

La afición del Atlas se entregó en 120 minutos y más, porque mucho antes de que el encuentro iniciara, los cantos ya retumbaban en el inmueble. Incluso al llegar a la tanda de penales, el apoyo siguió de manera incondicional para los Rojinegros.

En los primeros quince minutos, Atlas salió a intentar adueñarse de las acciones, lo cual consiguió de manera parcial. Atlas tuvo una ocasión de peligro real en el minuto 5′. Atlas recuperó gracias a la presión alta y un servicio desde la izquierda raso y fuerte para Julián Quiñones no alcanzó a ser definido.

Al 15′ León equilibró las acciones. Demostró que no sería sencillo domar a la fiera y un disparo cruzado de Víctor Dávila logró enfriar el ímpetu de los locales.

Al 27′ Julián Quiñones desperdició una clarísima ocasión surgida de los pies de Camilo Vargas. Un largo trazo desde su área que superó a las tres líneas de presión de los Esmeraldas puso al colombiano de cara a gol. Este disparó ante la salida de Cota y estrelló la pelota en el poste izquierdo del arquero de Mazatlán.

Al 37′ otra vez Quiñones tuvo otra clara, en un mano a mano con el cancerbero de los visitantes. Julián realizó un mal control de la pelota y eso le dio un instante de ventaja a Cota para atajar el esférico.

Ya en el 54′ Quiñones de espaldas tocó para Rocha disparó y Cota rechazó. Instantes después, tras el cobro de un tiro de esquina, y tras un disparo machucado desde las afueras del área, Aldo Rocha saltó y peinó la pelota para cambiarle la trayectoria a la pelota, y hacerle la vida imposible al arquero. Al 55′, Atlas igualó de nuevo las circunstancias del partido.

Pese a la revisión en el VAR por un posible fuera de lugar de Rocha al momento del toque, el árbitro avaló el tanto que igualó el marcador.

Al 80′ Atlas perdonó una ocasión increíble. Tras un par de regates dentro del área, Christopher Trejo sacó un disparo que pegó en el travesaño y después en el poste. El rebote le llegó a Edgar Zaldivar, quien no conectó de forma adecuada y la entregó a las manos de Cota.

El final del juego en sus 90 minutos se volvió ríspido y de mucho contacto. León sufrió dos expulsiones: Jean Meseses en la banca fue expulsado por hacer una señal en la que simula un robo del bolsillo. La segunda fue al 93′ para Emmanuel Gigliotti por un contacto en una pelota dividida sobre Martín Nervo.

Aún hubo tiempo de otra jugada más en el arco de León. Al 88′ salió un potente disparo de la pierna derecha de Edgar Zaldivar, pero que manoteó Cota y desvió a córner.

Al 108′ Camilo Vargas apareció de nueva cuenta para hacer una de sus acostumbradas intervenciones salvadoras. En un mano a mano de Elías Hernández con el arquero, este se quedó con la pelota.

León estiró la cuerda, y con un jugador menos, logró llevar la definición del título hasta la tanda de penales.

CAMILO VARGAS, HÉROE EN LOS PENALTIS

Elías Hernández fue el primero en marcar para León con un disparo fuerte y a su izquierda, mientras que Jesús Angulo igualó con otro tiro raso y pegado al poste derecho.

Fernando Navarro erró en la ejecución. Se lo entregó a Camilo Vargas, quien fue a su poste izquierdo. Aldo Rocha cruzó demasiado y lo estrelló en el poste izquierdo.

Ángel Mena ejecutó a la perfección y engañó a Vargas. Edgar Zaldivar disparó fuerte y aunque Cota tocó el balón, no pudo evitar la igualada.

William Tesillo engañó otra vez a Vargas cruzando a su derecha, al igual que Brayan Trejo haciendo lo propio con Rodolfo Cota.

Luis Montes intentó cruzar de nuevo, pero Vargas se estiró a su derecha. El penalti definitivo llegó desde el botín derecho de Julio Furch, quien disparó a la derecha de Rodolfo Cota. A pesar de que el portero mexicano adivinó, el tiro fue muy colocado y el Estadio Jalisco explotó: el Atlas es campeón.