Por Surya Palacios / Alto Nivel

La Sedena se ha negado a dar información sobre el sistema que recabará los datos biométricos del rostro de los pasajeros que utilicen la nueva terminal.

El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) debe entregar la información del sistema mediante el cual se recabarán los datos biométricos de las personas usuarias de esa terminal aérea, determinó el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), luego de que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se negara a dar detalles al respecto.

El pasado 21 de marzo, cuando se inauguró ese aeródromo, ALTO NIVEL informó que los pasajeros que acudan al AIFA documentarán por sí mismos o en los mostradores entregando los datos biométricos de su rostro, para con ello pasar más rápido las áreas de seguridad y el momento de abordaje al avión, de acuerdo con el general de brigada Gustavo Vallejo Suárez, comandante del Agrupamiento de Ingenieros que se encargó de la edificación de esa terminal aérea, e informó de dicho sistema.

En ese tenor, a través de la Plataforma Nacional de Transparencia se le pidió a la Sedena que entregara la información respecto del sistema “E-Gates”, a través del cual se recabarán esos datos biométricos, a lo cual se negó la institución castrense, argumentando no contar con datos en ese tema, además de que ese sistema no se ha implementado al 100%.

“El AIFA actuó de manera errónea o equivocada, pues en la respuesta primigenia se limitó a declarar la inexistencia de la información, pero omitió dar certeza de la forma en cómo realizó esta búsqueda”, señaló en un comunicado Adrián Alcalá, comisionado del INAI.

En este caso, destacó el funcionario, es importante conocer detalles del manejo de los datos personales en poder del AIFA, pues no se debe olvidar que los avances tecnológicos “han implicado la necesidad de recabar una gran cantidad de información que puede ser utilizada para lesionar derechos, por lo que es necesario vigilar que se protejan los datos personales de acuerdo con los principios establecidos en la Constitución” mexicana.

Alcalá señaló que el INAI “estará pendiente de que la protección de datos en este Sistema cumpla con la normativa correspondiente”.

El sistema de control biométrico que se implementa en el AIFA, el cual -a decir de Sedena- todavía no está operando en su totalidad, consta de siete pasos: “Primero, gestión del consentimiento; segundo, asociación al pase de abordar; tercero, una digitalización y verificación del pasaporte del pasajero; cuarto, lectura y verificación del pasaporte digital; quinto, captura del rostro en el módulo o una selfie en su celular; sexto; comparación de este registro; y séptimo ya finalmente la creación del registro digital del pasajero”, explicó Adrián Alcalá.

Sin embargo, se desconoce quién resguardará los datos biométricos de los pasajeros; si es el gobierno, qué dependencias lo harán; si es un particular, qué empresa y por cuánto tiempo estarán operando con los datos; con qué fines serán utilizados los datos biométricos que sean tomados; y cuánto tiempo serán almacenados. Además, tampoco se conoce el Aviso de Privacidad del sistema.

De igual forma, no se sabe si existe una opción de ingreso a la terminal aérea para aquellos viajeros que no quieran entregar sus datos biométricos.

Los datos biométricos son todas las propiedades físicas y fisiológicas del individuo, incluyen nuestras huellas dactilares, el iris, la retina, la forma y característica de nuestro rostro, nuestro color de piel, y hasta las particularidades de nacimiento que tenemos en nuestro cuerpo.

Se trata de datos sensibles, que solo pueden obtenerse con el consentimiento expreso del titular de los mismos, quien tiene derecho a negarse a su entrega.

El derecho humano a la privacidad incluye poder decidir, de manera libre e informada, la forma en la que proporcionamos nuestros datos personales a instituciones públicas y privadas, lo que incluye limitar el uso de nuestros datos biométricos.