Luego de la tragedia mediática que profundizó el descrédito y el desgaste político del gobernador Roberto Sandoval; que de una u otra manera le impactó al candidato del PRI a sucederlo, de manera providencial desde el mismo seno del poder político nacional, el escenario mediato se le recompuso al gobernante; de esta manera se le reordenaron los compromisos políticos y el importante papel que debe cubrir en los próximos comicios.
Para Manuel Cota, este hecho en lo inmediato no representa gran cosa, toda vez que ya están registrados todos los candidatos a regidores, ediles, síndicos y diputados, propietarios y suplentes que solo tienen una marca, la del gobernante, que ahora tiene el compromiso primero de contribuír con lo que tiene de patrimonio político, operadores de tierra, para el triunfo del abanderado del PRI.
Y esto dicho así de simple tiene varias complicaciones, para Roberto que es un adalid de la operación en tierra, que sabe cómo mover electores a la hora buena del sufragio, se encuentra en la revisión estricta de la operación electoral, dado que hace tres años, en las elecciones pasadas, a un alto costo hicieron una enorme movilización de electores, de sus huestes y de las ajenas, llevaron a medio mundo a votar y obtuvieron la estridente derrota en Tepic.
Ahora se impone una mayor meticulosidad de sus gentes de tierra, dado que en tal ocasión llevaron a las urnas a quienes votaron por el adversario.
Y en el territorio de Manuel Cota, las preocupaciones son y seguirán siendo por la candidatura de gobernador, las que complementan la planilla municipal y del congreso, no les quita el sueño, toda vez, que las figuras, nombres y candidatos no le son propios, ni es su responsabilidad llevarlos al triunfo; todos ellos y ellas, deben de hacer el ejercicio que impone la militancia y los colores de su partido, tienen que sumarse y aportar lo que traigan al triunfo del candidato a gobernador.
Ahora con toda su inexperiencia política y electoral, tienen que hablar las tesis y proclamas de Manuel, tener un lenguaje común y una presencia mediática que sea complementaria de la figura principal, que es la del nominado a gobernador.
Es un escenario, el del tricolor la mar de difícil; tiene dos vertientes la campaña, una, la importante que es la de Cota, con su equipo de trabajo que no termina de compactarse, -siguen los trascendidos de luchas internas- con los genios del comité nacional que llegan a deshacer e imponer criterios; y dos, la de los nominados a síndicos, regidores y diputados, cuyas capacidades y rentabilidad electoral son una incógnita, con criterios sino encontrados, al menos diferentes del posicionamiento que ya tiene logrado Manuel.
EL QUÉ HACER
Seguimos con el canon de las campañas; para el PRI, es esencial la identidad del candidato, menester fortalecer la credibilidad de su oferta política, a ello deben sumarse las acciones de todos los otros candidatos; mientras Manuel mantenga la credibilidad de su mensaje, le podrá dar credibilidad a todo lo que emitan los candidatos menores del tricolor.
La espontaneidad del novato puede resultar inconveniente, expresiones ajenas al dictum del candidato mayor, pueden ser disruptivas y romper la estructura del posicionamiento que ya tienen logrado; con una oposición tan atomizada, es imprescindible que aprovechen las oportunidad que les ofrecen las expectativas de quienes serán sus electores.
Se impone la obviedad de la recomendación, que los candidatos menores desarrollen la capacidad de clarificar y simplificar su propia identidad, que sea subsidiaria de la que ya tiene Manuel en el imaginario colectivo electoral; de esta manera podrán complementar la operación de las brigadas de tierra, optimizar la capacidad de comunicar y persuadir al electorado indeciso y, sobre todo, meterse al territorio de los nuevos electores, esas decenas de miles de jóvenes apáticos en su primera experiencia como electores switcher´s.
En una campaña tan competida y con tanto candidato en la contienda, la promoción del voto deber ser la mar de efectiva, todos los candidatos deben compartir la visión del modelo simple, sencillo y claro de la promoción; con toda la cultura y la historia acumulada que tiene el tricolor, su campaña ganadora se basa en una “maquinaria”, no se valen los berrinches ni las omisiones, deben entender que es un proyecto común y se trata de sumar.
¿Quién es el mejor para la operación política..? ¿Roberto Sandoval o Manuel Cota? el candidato a gobernador tiene mayor experiencia, y al igual que el gobernante, ha ganado todas sus elecciones; hoy, con el reflujo y reacomodos ordenados deben de hacer sinergia sus equipos; utilizando lo mejor de sus agentes para la operación política, y profundizar en la difusión de mensajes.
En redes es preciso mensurar su importancia en la campaña, la internet comunica de manera instantánea, genera inter acciones, pero no votos; y las redes sociales no movilizan electores, solo los convocan; y no olviden la verdad de a kilo, la difusión y publicidad abre los caminos al electorado, pero es en tierra con estrategia y recurso$ dónde se ganan las campañas.
Digo…
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