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Lo acepta su Secretaría Técnica
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Difícil y complicado escenario para los poderes judiciales
El día de ayer, luego de actividades con las autoridades estatales, el magistrado del poder judicial de la Ciudad de México, Eliseo Juan Hernández Villaverde dictó una conferencia en el auditorio del poder judicial ante funcionarios judiciales, y la presencia de algunos Abogados litigantes y estudiantes de Derecho.
En su carácter de Secretario Técnico de la Comisión para la Coordinación del Sistema de Justicia Civil y Familiar” es decir, tiene las dos funciones.
El tema fue “La implementación de la oralidad civil y familiar en México” y lo hizo con bastante soltura, conocedor del tema que maneja al dedillo.
La exposición fue muy clara desde el principio de su alocución, lo que se espera en operadores de la administración de justicia y Abogados litigantes, es un cambio de 180 grados de paradigmas judiciales y procesales; dijo que éstos y aquellos, deben estar dispuestos a aprender, a capacitarse y a desaprender de todos los paradigmas que actualmente se tienen con el sistema escrito de la justicia civil y familiar.
El ponente no entró en su disertación a los aspectos torales del Nuevo Código Nacional de Justicia Civil y Familiar, su exposición fue realmente preliminar para iniciar el conocimiento de este nuevo ordenamiento que tiene 17 principios fundamentales que le dan sustento y estructura.
Se focalizó en la implementación de la justicia digital, habló de ejemplos en otros países de américa latina y de su particular experiencia en este tema en los juzgados de la CdMx.
El quid del asunto es que los procedimientos de este nuevo cuerpo procesal es la oralidad como norma en sus variados procesos según la materia de que se trate. Recurrió a tópicos sobre la reticencia de Abogados litigantes para el sistema digital, dando ejemplos de que los Abogados patronos deberán de cambiar sus estrategias para la prestación de servicios profesionales y las nuevas formas de tasar sus honorarios.
Expuso los riesgos inherentes al uso de la Inteligencia Artificial en la manufactura de los expedientes digitales, en el contexto de que se quiera o nó, los nuevos sistemas de comunicación digital llegaron para integrarse a la administración de justicia.
A pregunta expresa, de que si la comisión que preside, tendrá los recursos suficientes para apoyar a los poderes judiciales de los Estados en la implementación de este nuevo código, señaló sin pena alguna que la COCIFAM no cuenta con recurso alguno, su función queda a nivel de asesoría para implementar los estándares mínimos de cada uno de los procesos para implementar la vigencia del nuevo CNPCF en los TSJ locales.
Cuestión que muestra el complicado panorama de los poderes judiciales estatales; al menos en Nayarit, el presupuesto que debe ejercer el poder judicial debe subir de menos unos dos puntos porcentuales sobre su impacto en el presupuesto de egresos de todo el poder estatal.
Y en este escenario radica el protagonismo que la magistrada presidente Aracely Ávalos Lemus deberá llevar a cabo con el gobernador Miguel Ángel Navarro para que en un sano ejercicio de análisis presupuestal se compare la precariedad que tenemos en relación a lo que otras entidades como la nuestra tienen de sus congresos estatales.
La población en México, en su gran mayoría, tiene poco o nulo conocimiento de sus derechos y obligaciones, y no existe una estrategia nacional para mejorarlo. El nuevo Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares ha sido la respuesta del Estado mexicano.
Miguel Ángel ha mostrado un perfil enormemente justicialista y tiene una clara visión de que la procuración y administración de justicia son los instrumentos del Estado que necesitan mejorarse, para que la sociedad tenga acceso a una justicia transparente, pronta, expedita y se destierre para siempre el diagnóstico aquel de la “Justicia Cotidiana” de que la justicia civil en México, es lenta, compleja, costosa y corrupta.
Tarea de romanos…
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