En sesión conjunta, los plenos del Tribunal Superior de Justicia y el Consejo de la Judicatura de Nayarit hicieron un público reconocimiento a la labor jurisdiccional del magistrado Manuel Salinas Solís, quien concluye el encargo para el que fue designado por el Poder Legislativo en diciembre de 2009.
El presidente del Poder Judicial, doctor Pedro Antonio Enríquez Soto, hizo la entrega del testimonio de reconocimiento al maestro Salinas Solís “por haber cumplido el periodo constitucional como magistrado del Tribunal Superior de Justicia, desempeñándose con alto sentido de responsabilidad, honorabilidad, honestidad y profesionalismo, enalteciendo los principios de la función judicial”.
En el salón de sesiones “Prisciliano Sánchez Padilla” del Tribunal Superior, el presidente de la institución manifestó que “el maestro Manuel Salinas Solís es un magistrado que ha puesto al servicio de Nayarit y de los justiciables su mayor esfuerzo para rendir hoy buenas cuentas de la honrosa encomienda que recibió de la Legislatura y el pueblo de nuestra entidad».
Con su elocuencia formal, Enríquez Soto indicó que “el paso por la vida es dejar constancia de que la experiencia ganada sólo es posible preservarla si se comparte. Hoy tengo la plena seguridad de que el magistrado Salinas es un hombre generoso y tiene el mejor lugar para compartir lo que sabe y aportar su experiencia: la Universidad, su segunda casa, y sus beneficiarios son y serán sus alumnos”.
El homenajeado fue cobijado por su familia, la señora Ruth Granda, su esposa e hijos del matrimonio, así como testigos del reconocimiento fueron estudiantes, profesores y el director de la Unidad Académica de Derecho de la Universidad Autónoma de Nayarit, maestro Humberto Lomelí Payán. Acudieron también el comandante de la Décima Tercera Zona Militar, general de brigada Miguel Andrade Cisneros.
Previamente hizo uso de la palabra el magistrado Rafael Pérez Cárdenas, presidente de la Sala de Jurisdicción Mixta, y señaló que Salinas Solís dignifica con su actuar el ejercicio jurisdiccional en beneficio de las familias y los menores de edad, así como en los asuntos de adolescentes en conflicto con la ley penal.
Dio cifras del desempeño de la mencionada sala del Tribunal Superior, con la contribución del homenajeado: de enero de este año a la fecha dicho órgano jurisdiccional ha emitido 430 resoluciones, que ya superaron las 320 de todo el año pasado. Ciento cuarenta cinco de las resoluciones del presente año fueron propuestas por la ponencia del magistrado Manuel Salinas “y aún no cerramos, todavía falta mañana”.
Al inicio, los magistrados Raúl Gutiérrez Agüero y Román Carlos Rafael González Momita ponderaron las razones del mérito de Salinas Solís y destacaron el aprendizaje obtenido cuando compartieron con él la integración de la Sala Penal del Tribunal Superior.
En su oportunidad, el magistrado saliente expresó su gratitud por el reconocimiento y agregó que hoy viene a cerrar un ciclo dentro del Poder Judicial nayarita, “luego de haber sido parte de un colegio renovado a quien el Constituyente Permanente le confió nuevos derroteros y le impuso el deber de alcanzar más y mejores resultados”.
Una institución “que vigorizó y dispuso su independencia frente a los otros dos poderes” para impartir justicia conforme a los mandatos constitucionales: de manera pronta, imparcial, completa. «Todo lo anterior, naturalmente, en un contexto de colaboración interinstitucional, como lo ordenan expresa y tácitamente tanto el Pacto Federal como nuestra propia Constitución”.
Luego de manifestar su agradecimiento a todos aquellos que le dieron la oportunidad de prestar un honroso servicio público desde el Poder Judicial del estado, como hace varios lustros lo hizo en el de la Federación, el magistrado Salinas Solís dijo que la impartición de justicia en México y en el mundo experimenta cambios de fondo.
Señaló que en este contexto la impartición de justicia requiere constante autocrítica, no encerrarse en antiguos paradigmas y además “el derecho debe renovarse, porque como aseguran los teóricos en la materia, la acción de renovar está en su propia naturaleza y porque el servicio que debe prestarle a la gente así lo exige”.
“Por eso la implantación de los medios alternativos de resolución de conflictos a partir de la conciliación, la mediación y el arbitraje ya están en marcha en la entidad”. Dijo asimismo que “la oralidad no es un remedio para todos los males en materia de administración de justicia pero sí es un nuevo y poderoso intento en dirección de mejorarla”.
Y agradeció el pleno respaldo del personal de la institución a su labor en el Poder Judicial. “Sin el esfuerzo y laboriosidad que despliegan todos los días y desde tempranas horas, nada marcharía”.
Cerró su alocución con una buena sinécdoque : “Me voy convencido de que a esta nave poderosa y necesaria que es el Poder Judicial le aguardan tiempos venturosos: tiene buen capitán, espléndida tripulación y, por sobre todo, objetivo claro y una bien trazada ruta”.
