- El rey del Ca$h
- Singular visión del poder
Elena Chávez, es la autora del libro que ha causado sensación en todos los medios y la clase política del país –El Rey del Ca$h- se define a sí misma en una parte del texto como vegetariana y abstemia; al narrar una comida en la hubo vinos y carne asada entre los comensales. Utiliza su particular visión –así lo reitera- para narrar de manera testimonial y apoyada por tres buenas entrevistas, lo que ella vivió durante 18 año en su cercanía con el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador y de lo que le consta al ser pareja de César Yáñez Centeno, su jefe de prensa, el hombre más cercano al presidente, de múltiples funciones en la larga carrera del tabasqueño para ascender al poder.
Su prosa es ingenua, incursiona en un género con un estilo fresco y espontáneo, y deja sus particulares puntos de vista, como el que señala en la introducción, “confieso que vi y escuché muchas cosas que lastimaron mi alma…” a lo largo de 248 páginas, más las declaraciones patrimoniales de los personajes central de su libro, se aprecia la descripción de la autora que tiene una interpretación ingenua de la realidad de nuestro sistema político mexicano; no recuerdo en que texto lo leí, pero, para estudiar la realidad en que se vive, ésta se aprecia tal cuál es..! no como debiera de ser.
Hemos de tomar en consideración del hecho que todas las personas viven la vida desde su realidad personal; y se llama esta realidad la realidad ingenua.
Es decir, quienes parten de un imperativo categórico para estudiar el talante y la conducta de nuestros políticos con la visión de que deben ser como… o lo que los gobernantes debieran hacer esto o aquello… nos narran una interpretación eminentemente subjetiva; en el caso la autora desconoce los mecanismos y factores que le dieron forma al sistema de gobierno de nuestro país, a lo largo de la historia de México, desde su proceso formativo, el escenario para alcanzar el poder, es una lucha sangrienta, descarnada entre las facciones.
Ya con la institucionalización de las facciones que triunfaron en el revolución mexicana, se estableció el sistema que magistralmente definió Don Daniel Cossío Villegas, como una dictadura con tintes democráticos, hereditaria de forma colateral; con la entronización del PNR, PRM y PRI, que tiene su cuarta versión en MORENA, la alternancia en el poder desde el 2000 perfeccionó mecanismos y creó muchas instituciones para estatales, empero, las reglas de operación siguen siendo las mismas.
Quienes conocen la evolución política de nuestro sistema en este siglo, al leer “El Rey del Ca$h” se darán cuenta que lo subyacente del libro es una singular historia de desamor, de la autora con el influyente personaje, a quien muchos de sus compañeros de trabajo y amigos le dijeron reiteradamente “no sabes con quién vives..”
De las entrevistas, la mejor sin duda por lo datos que aporta es la de nuestro avecindado Guadalupe Acosta Naranjo; Fernando Belaunzarán señala que “desmenuzar la personalidad del presidente, resulta, para quienes estuvimos cerca de él, espeluznante, porque su transformación fue total, grotesca, insólita, ofensiva..” y Ricardo Pascoe Pierce abunda señalando que “es una mente astuta, perversa, pero no es inteligente…, es absolutamente narcisista.., no sospeché tanta perversidad del tipo, pero tampoco me sorprende..”
Han existido otros presidentes de la república que revelan su genuina personalidad ya en el poder, Lázaro Cárdenas, Adolfo López Mateos, Luis Echeverría, Carlos Salinas de Gortari; con Andrés Manuel, toda proporción guardada, se repite la historia.
Los que esperaban alguna revelación sobre los escabrosos datos que Porfirio Muñoz Ledo ha dicho últimamente sobre un supuesto pacto del presidente con el narco organizado, se van a quedar con la ganas, este tema no aparece en el libro, que, la autora al final, endilga una conseja de tipo moral y ético: “Nos toca a las y los mexicanos decidir nuestro futuro. Aún lo podemos hacer porque nuestro voto es la entrada al poder de un gobernante, pero también su salida. Cuidemos nuestra democracia.”
Dos apuntes finales, la autora en la introducción deja constancia “como medida de seguridad, de mi vida y de mi familia, he guardado información que será dada a conocer a la opinión pública si por coincidencia, al sacar este libro, algo me pasara. De ser así, responsabilizo a los actores de esta historia que podrían sentirse evidenciados.»
En el apartado final de agradecimientos, la autora nos deja su invocación, que no deja de resultar rocambolesco, dado que se trata de un libro testimonial del quehacer de un político, y desde su dintel acredita en su religiosidad la mansedumbre del creyente: “Aunque ande en valle de sombra de muerte. No temeré mal alguno, porque tú, señor, estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento.”
Sí, un libro de desamor y de testimonios de la conducta de este huracán político que gobierna México.
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