-
La batalla por mantener el estado de derecho
-
Recomponer el aparato judicial
Los hechos hablan por sí solos, al haberse admitido como algo “normal” en el ejercicio del poder, el que los favoritos de los caciques magisteriales hicieran una ordalía cotidiana, percibiendo ingresos indebidos y en el inaudito de mantener el manto protector del poder judicial, deja algo más que el asombro de la sociedad; ahí se generan los rencores en contra de los gobernantes, que tienen y ejercen el poder sin pudor alguno con el ejercicio de pleno patrimonialismo.
Un adjetivo que acuñó el que fuera presidente de la República, Carlos Salinas de Gortari; y que a la postre él mismo fuese calificado de la misma forma. En Nayarit, el quehacer político es, dinámico y sin pudores; el gobierno de Miguel Ángel Navarro, en estos casi nueve meses de su mandato, han remodelado exitosamente las finanzas públicas, la administración tiene solvencia para programas y acciones específicas en áreas prioritarias, salud, educación, seguridad social e infraestructura.
Las obras públicas en las comunidades rurales, el atender de manera preventiva las inundaciones típicas del verano en los ríos Tuxpan, Santiago y Acaponeta, son la prueba de una constancia gubernamental pocas vista en la historia reciente de la entidad.
De ahí que la aplicación del derecho penal se ejerce sin filias, sin fobias, en la pulcritud del actuar de la institución del Ministerio Público y en las resoluciones de los jueces de control, se les exige las seguridades de que los imputados, sujetos a proceso, cumplan los extremos de las formas del procedimiento vigente; la nobleza del sistema penal de corte acusatorio y oral, se ve puesta a prueba con las acciones de jueces penales que antes obedecían la consigna de la presidencia del TSJ.
Hoy, la grave responsabilidad que tiene la magistrada presidente, Rocío Esther González, se ejerce con acciones correctivas, el cambio de jueces y de funcionarios del TSJ y del Concejo de la Judicatura, tienen el claro propósito de meter orden y quitar privilegios, y ahí están los primeros resultados, se hace sinergia con el discurso de los otros poderes, Nayarit lo requiere, deben de caminar en inter dependencia el orden de gobierno, para poner orden en la sociedad se requiere primero que las instituciones públicas no sigan siendo pasto de bribones aprovechados.
Parece que es una rara e inaudita condición, cumplir y hacer cumplir la Ley, la sociedad debe de acostumbrarse, el viejo aforismo latino debe seguir vigente, Sed Lex Dura Lex; sí, la ley es dura porque es la Ley. El gobierno estatal de Navarro Quintero está cumpliendo puntualmente con sus asertos, que se trocan en auténticas realidades en el acto de gobierno, dejaron de ser meras promesas de campaña…
Contacto.- mirtha.palacios@hotmail.com
