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Regidores aspiran a ser diputados
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Diputados que quieren ser ediles
De manera paulatina, de formas distintas, en ese policromo que es la representación política partidaria actual, vemos la emergencia de ese curioso narcisismo que se expresa en lanzarse públicamente como candidato para participar en los próximos comicios electorales, tan lejos –tan cercanos en tiempos de la acción partidaria- a diez meses del día en que iremos al sufragio para las elecciones.
El próximo proceso electoral contiene enormes grados de dificultad para la autoridad responsable, el acoso del oficialismo y con una consejera presidente tibia por no decir pusilánime ante el protagonismo presidencial, no solo los partidos políticos del frente opositor, sino la mismo sociedad y sus voceros se preguntan si llegada la hora estarán el INE y sus consejeros a la altura de las circunstancias.
Sin embargo en Nayarit este tema no es preocupación, hoy, de manera trémula y otros pudorosos, en los principales municipios de la entidad se conocen las intenciones de presidentes municipales, varones y féminas que “están considerando reelegirse, pero de momento solo están concentrados en gobernar a su municipio..”.
En este orden de gobierno, de todos los ediles, con honrosas excepciones son muy pocos los que se salvan de la rijosidad crítica que reciben de sus gobernados, por la pésima conducción del Ayuntamiento y de sus magros resultados; solo la presencia del gobernador Miguel Ángel Navarro que ha tomado los ingentes problemas de municipios para resolverlos, salva estas administraciones, algunas de ellas francamente impresentables.
Este fenómeno es muy marcado en Nayarit, merced a que el mercado interno es francamente débil, la mayor generación del reciclaje del capital se expresa con los dineros del erario, es el gobierno estatal y sus inversiones lo que impulsa la economía local, salvo las factorías cañeras y las grandes inversiones extranjeras en el renglón turístico, no se tiene una planta productiva que sea el atractor de las nuevas generaciones.
La hipercentralidad de la política es el sino que determina el quehacer de una buena parte de las nuevas generaciones¸ hace falta más sociedad y menos gobierno; es decir que la sociedad crezca por sus propios impulsos y por la acumulación del capital, dado que el llamado sector social de la economía –y en Nayarit tenemos cientos de miles productores rurales, ejidatarios, pescadores y trabajadores rurales- seguirá siendo el barril sin fondo de los dineros públicos.
De ahí la proliferación de precandidatos, es la mejor inversión y una de las actividades más productivas, fenómeno que muestra que cualquier iletrado aspira a ser candidato, “hasta de suplente de regidor..”.
La política, el servicio público considerado antaño como la profesión más elaborada para cualquier ciudadano, hoy es una actividad desprestigiada merced a la ignorancia e incultura de sus protagonistas; hoy el escenario social reclama un golpe de timón en partidos y políticos para ascender –difícil encomienda- a escenarios superiores en la grave tarea de saber gobernar pueblos.
Ojalá que en el próximo proceso electoral no tengamos tantos desfiguros…
Contacto.- mirtha.palacios@hotmail.com
