Las ambiciones expresadas en los prolegómenos de una contienda política así lo dictaminan; hay que pegarle al que va adelante; mala conseja para los competidores del mismo partido y una natural derivación de los adversarios de otras siglas; hoy en Tepic, el deporte es pegarle a Gianni Ramírez, el exitoso secretario de obras públicas del gobierno que preside Roberto Sandoval.
Este tipo de estrategias pueriles que hoy son la comidilla del día en los medios, y sobre todo en ese salón de bullyng que es al facebook, propio de acobardados que con perfiles falsos o propios de los nuevos hacedores de periodismo carroñero, con argumentaciones zafias y baladíes, nada de lo que está haciendo o hizo es positivo, se le aparta del contexto de ser el brazo constructor de un gobierno eficiente, para demeritar de manera estólida y subjetiva, su conducta como funcionario.
Esta exposición directa de lo que supuestamente es negativo del ingeniero Ramírez, está dedicada a exhibir aflicciones humanas y conductas presumiblemente punibles de todo lo que hace en cumplimiento de una exitosa política pública, subyace el anti gobierno, en la descalificación liviana, pocos o casi nadie se atreve a enderezar el dicterio en contra del gobernante, puesto que Gianni, miembro del gabinete gubernamental tiene un añadido, nadie lo esperaba hace menos de dos años, de manera natural se transformó en un cuadro de enormes potencialidades en rendimientos electorales.
Hoy, los adversarios que expresan sus angustias, nada saben de que en el diseño de una candidatura, el factor más importante está en otras partes, no atan a definir que las cuotas de los electores que votarán por los hombres que proponga el Pri, los tiene excelentemente bien cuidados la obra política de este gobierno; es el trabajo de gabinete el que nos dirá dónde están los indecisos y dónde la magra oposición; Gianni va en la cresta de la ola, y la diatriba, evidentemente no lo perjudica en absoluto, sino por esos extraños artilugios de la dinámica social, de facto, lo benefician.
¿Cómo surgió el posicionamiento de Gianni Ramírez en el contexto actual que lo hizo competitivo frente a otros postulantes..? de manera natural, cuando pidió licencia de su cargo y se hizo responsable de la campaña presidencial en el distrito dos, que incluye la capital del Estado; su formación de servidor público comprometido con las grandes causas que encabeza Roberto Sandoval, le dieron ese plus que tantos quieren y no encuentran, supo hacer “click!” con el electorado y entregó excelentes resultados como operador electoral.
LA CLAVE DEL ELECTORADO
Las claves de adhesión del electorado, está en lo que hace el gobierno y sus mejores hombres; no se puede mantener a toda la ciudadanía contenta y adherente con el gobernante y sus funcionarios, sin embargo son las acciones que corresponden a los intereses especiales del grande sector poblacional que los mantiene; y, además en un amplio sector de la clase media, gente que trabaja, que vive con la visión clara del devenir social, lo que hace Roberto, Gianni, Veytia, Orlando, Rodrigo y otros, están de acuerdo en ello.
Los temas de la campaña que viene, pudieron salir del producto de comunicación social del modelo de marketing de la administración de Roberto; el “seguro que sí..” “unidos podemos” “las grandes obras” hicieron que el acrónimo de Gianni Ramírez pegara en el imaginario colectivo.
Galván, torpe, torvo y corrupto diputado, emisario del peor pasado político que haya tenido la historia de Nayarit, nada tiene que hacer frente a Ramírez; fraudeador como empresario, incumplido en sus obligaciones fiscales y absolutamente insufrible en sus relaciones inter personales; para ser político hay que tener personalidad proclive a la empatía, y éste borrico es, francamente odioso, mendaz y necrófilo.
Del mismo corral, el exitoso empresario concesionario del transporte público, en igualdad de circunstancias a la luz de un riguroso examen de fortalezas y debilidades, Saldate sale mal parado; no solo pesa el grado universitario y el humilde origen de Gianni, sino el escrutinio público del cual ambos han sido objeto; al secretario de obras públicas se le imputan aseveraciones sobre el manejo irregular de los contratos de la obra pública de este gobierno; sin probanza alguna.
Al diputado Saldate, se le ha encuerado públicamente de ser un acaparador de los permisos, constituyendo un excelente negocio, difuminado en familiares, amigas e incondicionales; y, sobre todo, se le insiste en su manejo caciquil del gremio que tiene en un puño, a sus choferes y empleados que les escatima pagos conforme a los términos legales; intrísecamente ¿qué es Saldate..? ¿tiene valores propios, una enseñanza de vida que pueda ser un normativo a seguir..?, la obviedad es pues manifiesta.
Gianni Ramírez ya es una marca con apetecibles rendimientos electorales posibles; GR es su identidad, cromática, simbólica y cultural; su imagen tiene ya reconocimiento, juicio de valor y emocional en el imaginario colectivo electoral; lo único inadecuado ha sido, la reciente divulgación de un video que un aprendiz de consultor político diseñó con pésimos resultados. Con esos amigos…, para que quiere enemigos.
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