· Terminó una época
·  Magistrados a modo de la 4T

Los integrantes del Tribunal electoral del poder judicial de la federación
terminaron el día de ayer su periodo legal; por una gracia del oficialismo
merced a su servidumbre y haber ratificado las irregularidades electorales, se
les extendió su permanencia; en la Sala Superior sus magistrados, Gilberto
de G. Bátiz García, Felipe de la Mata Pizaña, Felipe Alfredo Fuentes Barrera,
Janine M. Otálora Malassis, Reyes Rodríguez Mondragón y Claudia Valle
Aguilasocho; y Mónica Aralí Soto Fregoso que se desempeñó como
magistrada presidenta.

Janine Atálora, magistrada que en varias votaciones nos dio una muestra de
su independencia política no alineada a Morena, se despidió con un ejemplo
de dignidad y de congruencia.

Llegan dos nuevos magistrados electos por los famosos acordeones, Gilberto
de G. Bátiz García, quien será el nuevo presidente; y Claudia Valle
Aguilasocho, de esta manera Morena cierra la pinza del control absoluto de la
única instancia judicial que les daba certeza a los mexicanos de que sus
procesos electorales tenían que ser llevados conforme a la legalidad y
regularidad que establece la ley de la materia.

Recordemos que el pasado 9 de abril en el Senado Morena apabulló a la
oposición, gracias a sus aliados y sólo modificó unos nombres en cuatro
estados, Morena sacó los nombramientos de 56 magistrados electorales para
30 entidades; el martes anterior no habría podido sacarlos porque, por
primera vez, se cayó su mayoría calificada.

El nuevo dictamen de la Junta de Coordinación Política consideró cambios en
Estado de México, Guanajuato, Jalisco, Querétaro y Yucatán, y se aprobó
con 86 votos a favor, 34 en contra y una abstención; los senadores
oficialistas y de oposición mostraron la cédula con la que votaron, pese a que
debe ser voto secreto.

Conforme al marco constitucional el TEPJF es un tribunal autónomo que
forma parte del Poder Judicial de la Federación, con la función de garantizar
la legalidad de los procesos electorales en México.
Sus decisiones deben ser tomadas con independencia, imparcialidad,
legalidad y objetividad, sin actuar a favor de ningún partido político, candidato
o actor en particular.

Empero, desde la ratificación de la ilegal sobre representación de Morena en
las diputaciones asignadas en la Cámara de diputados, hasta la sesión de
ayer, en que perdonaron las multas que les impuso el IFE a los ministros del
acordeón que integran la nueva Suprema Corte de Justicia del Nación, sus
decisiones son, de absoluta obsecuencia a las necesidades orgánicas del
oficialismo que se entroniza con todo en el poder político en nuestro país.

Una a una siguen cayendo las instituciones de un Estado democrático de
derecho que no terminó de cuajar. Solo les queda el IFE, aunque ya su
presidente y vocales son mayoría del oficialismo; ya no se tendrá certidumbre
de la legalidad de las elecciones, y las pasadas elecciones del acordeón de
los poderes judiciales ha sido un claro ejemplo de ello.

Y los órganos electorales de los Estados?, seguirán la misma suerte con la
presencia hegemónica de sus gobernadores; si es que al final no los
desaparecen.

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