Cargando ahora

AH..! LA VANIDAD…

  • Los pecados de los nuevos ricos de Morena

  • Hipocresía, expósita contradicción

En esa excelente película “El Abogado del Diablo” protagonizada por Al Pacino y Keanu Reeves, hay un diálogo extraordinario con tintes de filosofía y religiosidad sobre Dios y la labor que realiza en la humanidad el Diablo; y con esa maestría actoral de Pacino, al final de su exuberante disertación dice: “Aaahh…! La envidia, la vanidad…, el pecado favorito de los humanos..!”

Esta introducción viene al caso por la serie de acontecimientos de estas últimas semanas que los medios de toda gama han registrado con serios señalamientos de los pro hombres y mujeres de Morena cuyas muestras de riqueza recientemente adquirida nos demuestran la zafiedad y naques de lo que están hechos.

Quizás el epítome de todos ellos sea el  lujo del coordinador de los diputados del oficialismo, que demuestran que la austeridad republicana de Morena parece no aplicar para todos. El diputado Sergio Gutiérrez Luna y su esposa Diana Karina Barreras exhiben en redes sociales un estilo de vida de «rockstar», con un guardarropa y accesorios de lujo que contrastan fuertemente con el discurso de su partido.

Además de estos artículos, la pareja ha realizado viajes en clase premier, con boletos que superan los 50 mil pesos por persona.

Periodistas incómodos han investigado que el valor total de los bienes de lujo expuestos por la pareja se estima en 5 millones de pesos, una cifra que contrasta con el sueldo mensual de un diputado federal, que ronda los 131 mil pesos.

He tenido la fortuna de conocer a muchos presidentes de la república, platicar de cerca con ellos, desde Adolfo López Mateos hasta López Obrador; y quien me impresionó por el reloj Cassio que traía, de plástico, fue Carlos Salinas, todos los demás con buenos relojes de marca pero nada exagerado, igual los que portaba Don Fernando Gutiérrez Barrios o Don Jesús Reyes Heroles.

Conozco a hombres pudientes, millonarios, de Nayarit, de Maztlán y de Jalisco, y no son dados a presumir sus riquezas con joyas, relojes o ropa de marcas de alta gama; nó, los nuevos ricos de Morena exhiben sus nuevas riquezas por que nunca tuvieron nada; parias de la política de oposición, que cuando llegaron al poder se vuelven locos, que ante los señalamientos de su hipocresía se manifiestan zafios y con la dignidad propia del ofendido que se sabe impune con inauditas justificaciones.

Triste final del oropel de los funcionarios de Morena, por el desprestigo social que tienen, dadas sus evidentes contradicciones lo pagarán en las urnas, ya que en el mercado de las reputaciones sociales nada hay tan implacable como la condena generalizada de la conducta pública de los funcionarios de un gobierno.

Todos estos excesos no se van a olvidar, la memoria humana a largo plazo está particularmente adaptada a la retención de este tipo de relatos;  la crítica de los medios  ha sido implacable, que de una u otra forma les va impactar en los próximos procesos electorales, sin duda alguna; y más les vale que los recursos de las pensiones del bienestar no se les agoten llegado el momento de las próximas elecciones federales.

Y Juan Pueblo ya lo dice, lo sabe y lo comenta: “dicen que no son iguales.., es cierto, no son iguales, salieron peores…!”

Vox Populi..!


Contacto.- cronicaslip@gmail.com


 

Share this content:

Luis Ignacio Palacios Abogado, periodista de opinión e investigador de temas jurídico políticos; pionero en el periodismo de internet con su página “Crónicas del Sexenio” desde 1990. Premio estatal de periodismo en 1993. Ha sido columnista de los principales diarios impresos de Tepic Nayt. y de Puerto Vallarta Jal. Líder de opinión y referente en noticieros locales sobre el quehacer político gubernamental en la entidad.

Publicar comentario