- Sucedió lo que no deseaba Miguel Ángel
- Lo imperativo de la inacción gubernamental
- Acredita la cercanía con el presidente AMLO
En una de ésas pláticas que tuvo Miguel Ángel Navarro con dos de sus más cercanos amigos y ahora colaboradores, cuando aún tenía la condición de pre candidato de Morena y los vivales hoy amansados se lanzaban con todo en contra del galeno, se platicaba de las acciones de fortalecimiento y soluciones que había posibilitado con el gobierno de la república para resolver los desaguisados financieros del gobierno de Toño Echevarría.
Se analizaba la inconveniencia de que las fuentes oficiales o externas informaran de las acciones eficaces del senador con licencia, dado que una circunstancia de esta naturaleza, le sería políticamente incorrecto en plena campaña política; decía Navarro, “no quiero que se asuma que todo esto es una toma de posesión anticipada.., hay que darle su espacio al señor gobernador..”
Y pues los acontecimientos post electorales han dimensionado esa condición que tanto estuvo cuidando; la apertura del gabinete presidencial a las peticiones del gobernador electo demuestran que el movimiento se demuestra caminando, y Miguel Ángel ya camina como un auténtico gobernador en funciones tres meses antes de su toma de posesión; inédita condición.
Recuerdo que ya gobernador electo Rogelio Flores Curiel, era conmovedor ver los afanes de Roberto Gómez Reyes, que hacía giras toda la semana, llevaba a sus funcionarios principales, hacían asambleas, tomaba acuerdos ante las peticiones de la gente, como si fuese el inicio de su largo sexenio (que duró ocho años). Rogelio tranquilo, iba y venía a la ciudad de México y a La Paz BC sur.
A la declaratoria de gobernador electo, el caudillo Emilio “eme” González, fue muy respetuoso de las formas con su amigo del alma, el coronel Flores Curiel, el gobernador saliente, se fue a la ciudad de México y nos dejó trabajando con Alfonso Delgado para elaborar el Plan de Gobierno.
A su vez, el tribuno Celso Delgado, que fue tan cuidadoso de no recibir ayuda financiera del gobernador en funciones, ni de la Acaspen de Félix Torres que le disputó fuertemente la candidatura, se fue a la capital de la república a componer su singular gabinete con puro náyaro metropolizado.
Rigoberto Ochoa, por igual, bajó su protagonismo mientras terminaba el tribuno su sexenio, su llegada estuvo accidentada por la rijosidad de las oposiciones que habían tomado la entrada de palacio de gobierno.
El bigotón de Antonio Echevarría, ya electo gobernador, se fue para apoyar al candidato presidencial Vicente Fox, y no tuvo acciones públicas, hasta su toma de posesión; pese a su consustancial perversidad de echarle moscas a la leche, el sátrapa de la Mololoa respetó los tiempos y emerge como autoritario gobernador en su toma de posesión.
Roberto Sandoval, fue muy cauto como gobernador electo y no rebeló sus futuras acciones ni los integrantes de su gabinete hasta que la inminencia de la toma de posesión lo indicaban; la historia reciente del gobernador Toño Echevarría nos indica que al igual que la mayoría de sus predecesores, actuó con cuidado hasta su toma de posesión, estremecida por los hechos de sangre por todos conocidos.
Y ahora, que Nayarit tiene a un gobernador electo de enorme peso político intrínseco, con toda la urbanidad de lo que es menester, señala que no regresa al Senado, y al anunciar que mañana se entrevista en palacio nacional con el presidente de la república, informa que en “próximos días, habrán de llegar a Nayarit, distintos funcionarios, titulares de las dependencias que tienen lo necesario para resolver varias problemáticas que hay en la entidad y de esta forma comenzar a dar los resultados necesarios y solicitados por los ciudadanos desde antes de iniciar a gobernar, porque Nayarit ya no puede esperar..”
Y mientras el agobiado gobernador Echevarría, -inspecciona obras que realiza la federación- hace su martirologio y una inadecuada paráfrasis para apechugar las críticas y maledicencias que dice le hacen, “pues que esperan de uno.., yo soy un simple ser humano..! les digo; si a Jesucristo que vino a traer paz y armonía al mundo lo crucificaron..! que espera Toño Echevarría que suceda de uno…, pues no, no tengo porque quejarme…”
Si el gobernador estima que va camino a su Gólgota, debe voltear a ver sus apóstoles que le dejaron solo y a él, toda la carga del cierre del cuatrienio; aunque es de estimarse que hubo exceso de licencia poética bucólica en las comparaciones…
Digo…
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