- Inconformidad del gremio de Abogados
- Inusitado espaldarazo de Navarro a Petronilo
- Peligrosa inacción de la fiscalía en el sur del Estado
Ahora, con el inusitado espaldarazo que el gobernador electo en funciones Miguel Ángel Navarro Quintero diera públicamente al fiscal general del Estado Petronilo Díaz Ponce, ratificando su permanencia como tal en la próxima administración que presidirá el pugüeño, surgen voces de inconformidad en el gremio de Abogados y en las dirigencias de las organizaciones que integran la Federación de letrados de la entidad cuya presidencia ejerce atinadamente nuestro amigo José Martín Mayorga.
Se recuerda que el 12 de julio, en el desayuno del “Día del Abogado”el gobernador electo en corto y públicamente en su disertación ante las dirigencias de Abogados de diversos municipios, ofreció ser el canal de comunicación de los letrados con el elusivo fiscal del Estado, con claridad le pidió ser el conducto de la petición al secretario general en funciones, al talentoso Juan Antonio Echeagaray Becerra, para concertar una reunión en la cual estaría precisamente el gobernador electo.
Ayer, en su visita a la fiscalía el mismo Miguel Ángel reitera el generoso respaldo para Petronilo y su cercano equipo de trabajo; y aún por el dinámico trajinar del gobernador y de Echeagaray, la reunión ofrecida no se ha llevado a cabo. Se está en espera de los serios compromisos pactados.
En este escenario es prudente puntualizar, que, el trabajo de la fiscalía poco tiene que ver con la seguridad pública; esta cuestión es competencia de la SSP que dirige Jorge Benito Rodríguez; y en los Abogados litigantes existe fundada inconformidad con la actuación de los funcionarios de la Fiscalía, desde los agentes del ministerio público, directores, sub fiscal y contra el mismo titular de la FGE, por sus desatenciones, la discriminación que hacen de los Abogados litigantes, que mal atienden y de mal modo, como si fuésemos enemigos personales de los funcionarios.
Existe algo que no se puede ocultar, una diferencia enorme en los tiempos para la integración de carpetas de investigación, con la colusión de jueces de control; es un evidente tráfico de influencias; una querella presentada que no quieren judicializarla, pueden pasar años de litigio, audiencias de control y al final resuelven el no ejercicio.
A contrario, recién me informa un dilecto Abogado litigante, que en un caso que lleva, en un solo día, sí, en un solo día presentaron una querella, la ratifican, realizan peritajes, judicializan, emiten de inmediato la orden de aprehensión y la ejecutan a las cinco de la tarde:..! inaudito pero es veraz.
Piden los Abogados litigantes, a Petronilo ya ratificado como fiscal general, entonces debe actuar en congruencia con la política que preconiza Miguel Ángel: ser humilde, abatir la corrupción y el tráfico de influencias, ser atento y sobre todo servicial con los justiciables y sus Abogados, lo que significa que tiene que abrir su despacho, dar audiencias y atender los reclamos sobre el desorden y la desatención que existe en las agencias investigadoras.
¿Podrá el buen Petrus..? con su temperamento incontinente, elusivo y discriminador..? es de dudarse.
Se le propuso al ahora gobernador electo durante su campaña la realización de un Foro de Procuración y Administración de Justicia, y no pudo llevarse a cabo; de ahí se impone que en su prometedora agenda de gobierno, considere que:
Es urgente la refundación de la Fiscalía General del Estado, sus actuaciones en el sistema penal de corte acusatorio son deficientes, no existe la trilogía investigadora, se ha creado un híbrido que escapa a lo que establece el CNPP; la Policía Ministerial es un cuerpo que no cumple sus fines primigenios; se impone la separación de los servicios periciales para constituír un Instituto independiente de la FGE.
Y sobre todo, se impone que todo el personal que atiende al público -sobre todo los y las agentes del Ministerio Publico de las unidades investigadoras- tomen un elemental curso de relaciones humanas, y que recuerden que son servidores públicos en la delicadísima tarea de procurar justicia, que tengan el elemental decoro de saber tratar a las personas que han sufrido un agravio.
Y para hacer sinergia en esta difícil problemática que tiene la sociedad, el Poder Judicial debe ser puesto en el mismo escenario de ponderación sobre las actuaciones de sus jueces de control.
Para muestra, deben de conocer el clima de inseguridad e impunidad que prevalece hoy en poblados de Compostela y Bahía de Banderas, asaltos a mano armada, extorsiones, violaciones y tanto las policías estatal y municipales, como los agentes del MP permanecen en una sospechosa inacción.
Nadie duda de las razonables buenas intenciones del gobernador Miguel Ángel Navarro, empero, este escenario que campea en MP y jueces de control es crudo, lacerante y terriblemente ominoso cuya perspectiva reclama un cambio de 180 grados en el aparato de procurar y administrar justicia; dura y difícil tarea que se plantea al abrir las llagas de estas instituciones.
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