Por Surya Palacios / Alto Nivel
La Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción será la encargada de la indagatoria por un presunto conflicto de interés
La Fiscalía General de la República (FGR) abrirá una carpeta de investigación para indagar el posible conflicto de interés entre los contratos que mantiene Petróleos Mexicanos (Pemex) con la empresa Baker Hughes, y el hijo del presidente mexicano, José Ramón López Beltrán, quien habitó un inmueble en Houston, Texas, propiedad de un exempleado de esa compañía contratista.
Fuentes de la Fiscalía informaron a la prensa que la indagatoria estará a cargo de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC), oficina que retomará una denuncia promovida por el Partido Acción Nacional (PAN) el pasado 3 de febrero.
La FECC será la encargada de investigar si hay elementos para configurar algún delito, como el tráfico de influencias o el conflicto de interés, que involucren al hijo del titular del Ejecutivo Federal, Andrés Manuel López Obrador.
En ese tenor, este lunes el mandatario comentó que no existe problema alguno en investigar a su hijo. “No tengo información, pero en el caso que se abrieran la carpeta de investigación no hay ningún problema, todos debemos de comparecer ante la autoridad y el que nada debe, nada teme”, apuntó López Obrador.
La denuncia en contra José Ramón López Beltrán, el hijo mayor del presidente, fue presentada en la Fiscalía General de la República por el líder del PAN, Marko Cortés, luego de que se revelara que el vástago del mandatario habitó una lujosa residencia en Houston, Texas, que le rentó un exdirectivo de la firma Baker Hughes.
Según el colectivo Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), y el sitio Latinus, donde labora el periodista Carlos Loret de Mola, José Ramón López Beltrán y su esposa, la estadounidense de origen brasileño Carolyn Adams, vivieron en una residencia propiedad de Keith L. Schilling, quien laboró en la empresa Baker Hughes de 2016 a 2019.
La familia López Beltrán-Adams habitó el inmueble de Schilling desde agosto de 2019, lapso en el que -según la investigación periodística- la empresa Baker Hughes recibió varios aumentos en el monto de los contratos que esa compañía mantiene con Petróleos Mexicanos, sugiriendo la posibilidad de un conflicto de interés.
Según el dirigente del PAN, Marko Cortés, la denuncia interpuesta en la FGR es para que esa institución “investigue el origen de los recursos de las lujosas casonas de Houston que fueron exhibidas a través de los medios de comunicación, y además que se investigue todo lo relacionado a los contratos a las empresas proveedoras de Pemex”.
De su lado, otro de los promoventes de la denuncia, Julen Rementería, coordinador del PAN en el Senado, declaró a principios de febrero que buscaban conocer cómo se obtuvieron los recursos para la casa del hijo del presidente en Texas, Estados Unidos.
El escándalo por las revelaciones sobre la forma en la vive el hijo mayor de Andrés Manuel López Obrador generó que este descalificara en diversas ocasiones a Carlos Loret de Mola, quien difundió el reportaje, y a MCCI, que hizo la investigación. El mandatario incluso reveló los presuntos ingresos del comunicador, al tiempo que solicitó al Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) para que indagara el patrimonio del periodista.
La semana pasada, el INAI le respondió al presidente que ese organismo constitucionalmente autónomo no tiene facultades constitucionales ni legales para investigar los ingresos y bienes de ningún ciudadano.
