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El revolucionario que creó una religión
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Jesús de Nazareth sigue siendo un enigma
A los 18 años, pasada la ceremonia en la que se me otorgó el grado de maestro masón en la Logia Gnosis # 3 de la Gran Logia Occidental Mexicana, en Guadalajara, uno de mis queridos maestros, un erudito en la cultura gnóstica, me regaló un libro de unas 200 páginas, cuyo autor de apellido Swartzman era un monje alemán de los franciscanos, “El complot de Pascua”, en el que narra sin tintes religiosos –sólo históricos- el cómo un hombre hijo de un carpintero, fue capaz con sus treinta y tantos días de ministerio de socavar el dominio romano y a la postre se transformó en el símbolo religioso de una gran parte de la humanidad occidental.
Desde entonces, para el que escribe –su figura- ha sido una de las que más he estudiado, junto a Sidharta Gautama Buda, símbolos religiosos importantes de la humanidad.
Hoy, más de 2000 millones de personas en 160 países celebran cada año que vino al mundo; empero la mayoría le rinden culto pero muy poco saben de quién fue en realidad, si nos atenemos a los hechos históricos, registrados por los evangelios de la Biblia y los otros evangelios apócrifos que la iglesia católica decidió suprimir.
Jesús protagonizó los eventos más asombrosos y mágicos en su vida, desde su alumbramiento y concepción, que nos hace dudar si era de este mundo, o fue un híbrido extraterrestre implantado en el útero de la jovencita María.
Fue ante que nada un nacimiento inusual, anunciado por una estrella y el niño nace en un pesebre. Mientras, sabios de Oriente ven una estrella única y la siguen por semanas, eran astrólogos. De alguna forma sabían que aquel recién nacido sería el Rey más importante del mundo. Y así fue.
Al escuchar sobre su nacimiento, Herodes, rey de Judea, paranoico por perder el poder ante el Rey de reyes, ordenó asesinar a todos los bebés menores de 2 años, y ese día quedaría en el calendario cristiano como la matanza de los santos inocentes.
Uno de los enigmas en la vida de Jesús, es su educación ya que desaparece 18 años y vuelve con una sabiduría inusual..! A los 12 años, dejó boquiabiertos a los maestros del Templo de Jerusalén hablándoles de tú a tú. Después desaparece. ¿Dónde se educó..? con los esenios..? en la India..? en el Tibet..? sigo esperando un libro que nos dé a conocer en dónde estuvo y quienes le educaron.
Regresó a los 30 años con una enseñanza tan profunda que atrae multitudes y enfurece a líderes.
Y luego el primer milagro: convierte agua en vino..! (ya ven porqué es importante tomarlo) En su primer milagro público, Jesús transforma 600 litros de agua en vino de máxima calidad. “Has guardado el mejor vino para el final” dijeron los invitados. (este episodio lo narra excelentemente José Saramago en su excelente libro “El evangelio según Jesucristo”) Lo asombroso no fue el vino… sino que nadie supo cómo lo hizo.
La multiplicación de comida para miles de personas, 5 panes y 2 peces. Eso era todo. Pero Jesús alimentó a más de 5.000 personas y aún sobraron canastas llenas. ¿Cómo puede sobrar más de lo que había al principio?
Y luego podía levitar, caminó sobre el agua… en medio de una tormenta, sus discípulos lo ven acercarse a la barca donde estaban, caminando sobre el agua del mar. Pedro intenta imitarlo, pero se hunde al dudar.
El dominio de los r de la tierra: calma el viento y el mar con una frase, en medio de una tormenta, Jesús dice: “Calla, enmudece”. El viento y las olas se detienen de inmediato.
Sus discípulos, que lo conocían, se preguntaron: “¿Quién es este ser, que hasta el mar lo obedece?”
Sanó a leprosos solo con tocarlos; en aquel entonces la lepra era incurable y contagiosa. Nadie quería acercarse a los afectados. Pero Jesús tocaba a los enfermos y al instante quedaban curados, uno volvió corriendo, gritando de alegría… otros nueve ni siquiera regresaron para agradecerle.
Poseedor de una energía vital, resucitó a un hombre muerto hacia 92 horas, Lázaro estaba ya sepultado cuando Jesús intervino. “Lázaro, sal fuera”. Y el muerto salió, envuelto en mortajas. Asombro absoluto. Vivió varios años después de aquello.
Un deimurgo, ya que expulsaba demonios que gritaban su nombre en cuerpos humanos poseídos, al ver a Jesús, los poseídos decían: “¿Has venido a destruirnos?” Jesús no gritaba ni realizaba rituales largos… tan solo decía: “Sal de él”. Y los espíritus obedecían. La gente quedaba pasmada.
Ah y esta es de antología, protege a una adúltera condenada, un grupo de hombres la rodeó para apedrearla, como era habitual ante aquel pecado. Jesús se interpone a la multitud y dice: “El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra”. Uno a uno, dejaron las piedras y se marcharon.
Resucitó al hijo de una viuda, en medio del funeral de un joven en Naín. Mientras llevaban el cuerpo, Jesús tocó el ataúd y el joven volvió en sí mismo y se levantó. Imaginen ser testigo de aquello.
Brilla como el sol en la transfiguración, en una montaña, su rostro resplandeció tan fuerte como el sol de la mañana, su ropa se volvió de un blanco intensísimo (tomó contacto con sus mayores..?) Moisés y Elías aparecieron y hablaron con él… boquiabiertos.
Predijo su propia muerte… y la aceptó, sabía muy bien que lo traicionarían sus propios discípulos, que lo negarían por miedo. Y aún así decidió no escapar. En la cruz existen dos versiones de lo que dijo: “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.” Y la otra, “Elí Elí lama sabactani” (ahora me sumerjo en la alborada de tu presencia)
Resucitó al tercer día y su tumba quedó vacía, más de 500 personas afirmaron verlo con sus propios ojos después de su resurrección, tras haberlo crucificado y enterrado. Comió, enseñó y caminó con sus discípulos durante 40 días más antes de ascender.
Debemos reparar en que cada evento tiene aparte una doble lectura gnóstica. Por ejemplo, caminar sobre el agua representa el dominio del espíritu sobre la materia, o la crucifixión simboliza la muerte del ego y la liberación del espíritu de las ataduras materiales (un paso clave hacia la iluminación).
Desafió al poder, a su sociedad y propuso una visión nueva donde el amor y el perdón vencen al miedo y la violencia. Es el padre espiritual de Occidente, un proceso civilizador asombroso.
Creas o no en sus milagros, la figura de Jesús sigue resonando 2025 años después de existir; para el escriba, lo considero uno de los revolucionarios más grandes de esta humanidad, que en su nombre se ha remodelado la sociedad contemporánea.
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