*Exhortan a defender fortalezas del Poder Judicial de Nayarit y la autonomía de los jueces
*”No al autoritarismo, sí a la legalidad”, señala presidente de sala unitaria del Tribunal Superior
El acto cívico que cada lunes primero del mes celebra el poder judicial, es una excelente oportunidad para la administración de justicia; ayer, con su oratoria pausada el Magistrado Ramón Marmolejo, le puso los puntos sobre las íes; solo le faltó poner el nombre del destinatario, al hacer una clara defensa de la autonomía del poder judicial.
Dado el extraño clima que prevalece en algunos funcionarios del poder ejecutivo y personeros del poder legislativo, el orador del evento dejó de manera clara y puntual, que no están dispuestos a recibir lances de otros poderes de la entidad; ahora los magistrados que se han compactado en defensa del poder del cual forman parte, esperan que luego de este discurso político, se reordenen las relaciones inter institucinales entre sus pares estatales.
Luego de señalar que la principal fortaleza del Poder Judicial de Nayarit es su capital humano, el presidente de la Primera Sala Unitaria del Tribunal Superior de Justicia, magistrado Jorge Ramón Marmolejo Coronado, destacó en acto público que las y los servidores judiciales se esfuerzan día a día y dan lo mejor de sí para poner en alto a “la institución que desde hace muchos años ha logrado contribuir a la gobernabilidad del estado”.
Por tal motivo, Marmolejo Coronado destacó la necesidad de defender las fortalezas de la institución y velar por la autonomía de los jueces y la independencia judicial, proclaman un: “No al autoritarismo, no a la intervención de facultades entre poderes; sí a la legalidad, sí a la honestidad”.
En el acto cívico mensual de quienes laboran en el Poder Judicial, encabezado por el magistrado Pedro Antonio Enríquez Soto, el presidente de la Primera Sala Unitaria del Tribunal Superior manifestó que “la institución hoy enfrenta las amenazas políticas y politiqueras en los principios fundamentales de su génesis… y que pretenden conseguir sentencias favorables a base de presiones de actores fraudulentos y mentirosos”.
De ahí que reiteró su llamado al personal judicial a seguir contribuyendo a “la gran responsabilidad de tener en cada rincón de la patria un tribunal que defienda al desprotegido”, tal como fue el deseo expresado por el generalísimo Morelos en los Sentimientos de la Nación. “Digámosle no al arbitrario y al abusivo, defendamos los principios de la actividad judicial”, agregó.
Un mensaje claro, sencillo y puntual; al poder judicial de Nayarit no le hacen mella los lances mediáticos que atentan en contra de su prevalencia e institucionalidad.